Pase tranquilo con el cobro electrónico de peajes
La automatización como se ha dicho, está presente en múltiples escenarios; si bien su mayor campo de acción está en los edificios y la domótica, las soluciones tecnológicas que provee también contribuyen a la movilidad con utilidades como el cobro electrónico de peajes.
El cobro electrónico de peajes es un sistema que permite su pago sin usar efectivo, ni siquiera es necesario detener el vehículo porque los sensores accionan las barreras para abrir el paso. Funciona básicamente instalando en los parabrisas de los automotores un adhesivo con un chip de identificación que es leído por el sistema, que de manera automática, debita de la cuenta bancaria el valor correspondiente.
Es un sistema pensado para viajeros frecuentes o personas que transitan la misma vía tarifada a diario o varias veces a la semana, pues supone un gran ahorro en tiempo ya que nunca es necesario detener el carro. Además se benefician por ejemplo, de la comodidad de no tener que buscar dinero, bajar la ventanilla para realizar el pago ni recoger un tiquete.
Por otra parte es una tecnología que también favorece el medio ambiente porque la emisión de gases se reduce cuando se evita la acumulación de vehículos detenidos o a muy bajas velocidades.
Para las empresas de transporte implementar este servicio les ayuda a mejorar el control sobre su flota porque tienen acceso a información relacionada con el horario, el monto y el lugar por donde pasaron sus automotores, lo cual contribuye a facilitar las labores administrativas, logísticas y presupuestales.
Formas de pago en el cobro electrónico de peajes
Actualmente en el país existen cuatro maneras de pagar un peaje a través de esta solución. El primero es el pregago simple, un sistema parecido a la recarga de celulares en el que el usuario consigna dinero directamente para que se vaya descontando en los consumos. Le sigue el prepago con cargo recurrente, que es cuando la persona autoriza a un intermediador cargar a un producto bancario, cuenta de ahorros, corriente, tarjeta de crédito, etc., un valor determinado cada cierto tiempo. El otro es el pago inmediato, una carga en tiempo real del consumo a un producto bancario convenido. Por último está el postpago, una forma de pago que carga posteriormente a la entidad financiera el valor del consumo.
El cobro electrónico de peajes va en crecimiento en el país y si aún son muy pocas las rutas que lo tienen instalado y la reglamentación sigue definiéndose su expansión va en ascenso, pues al igual que otros productos de automatización son confiables, escalables, requieren mínima intervención humana y se integran con otras aplicaciones; solo necesitan de una empresa con amplia experiencia en el sector que lo respalde.

