Por qué adquirir una UPS
La adquisición de una UPS se justifica desde muchos puntos vistas. Los principales están relacionados con la necesidad imperativa de evitar que una máquina detenga su operación, y limitar la desaparición de información de un computador o servidor.
Se ha dicho en anteriores artículos que una UPS (uninterruptible power supply) o SAI (sistema de alimentación ininterrumpida), es un módulo que permite el suministro de energía a un dispositivo de forma continuada gracias a que contrarresta cualquiera de las anomalías eléctricas que pueden presentarse.
Beneficios de una UPS
El primero de ellos tiene que ver con prevenir las variaciones de tensión. Un amparo frente a los picos, o en general frente a los altibajos en la corriente eléctrica, ayuda a extender la vida útil de los aparatos y componente electrónicos que están bajo la salvaguarda de un SAI.
La otra gran ventaja es que son un “seguro” contra apagones. Esto implica que nunca habrá pérdida de datos cuando el suministro de energía cese, ni siquiera el daño total o parcial en un equipo informático.
Funciones de una UPS
Otra importante información frente a estos sistemas es acerca de las funciones que cumplen, muy ligada a sus ventajas.
Proteger las subidas y bajadas de tensión. En términos generales lo que hace un SAI es mantener constante la corriente para que las variaciones eléctricas que se presentan en la red nunca lleguen a los equipos.
La segunda función de una UPS es impedir los apagones inesperados. Muchos de los modelos de SAI llevan consigo una batería que suple el suministro de energía unos minutos, lo cual permite conservar los aparatos en funcionamiento o hacer su correcto apagado. Eso sí, todo dependerá de la gama del sistema y de las necesidades de potencia de los artefactos conectados a él.
La decisión de compra de una utilidad de estas características debe ir acompañada de la asesoría y soporte técnico de un distribuidor autorizado de una de las marcas más reconocidas a nivel mundial.

